Avancemos hasta 2025: una barra de oro todavía compra una casa.
¿Ha apreciado realmente el oro? No. El dólar ha colapsado.
1975: $160/oz → 2025: $3,319/oz.
Eso no es creación de riqueza, eso es destrucción de moneda.
He estado observando esta tragedia desarrollarse durante décadas. Las imprentas nunca se detienen, sin embargo, nos dicen que la inflación es "transitoria". ¡Qué chiste! Cada vez que miro mis tenencias de oro, me recuerda cómo nuestro sistema financiero está amañado en contra de la gente promedio.
Mira, no pasé años acumulando metales preciosos para hacerme rico—lo hice para evitar volverme pobre. Mientras todos los demás perseguían ganancias en papel, yo estaba protegiendo mi poder adquisitivo.
¿La lección? El verdadero valor no proviene de aferrarse a activos que se inflan con un sistema roto; proviene de construir proyectos que escalen, aseguren y descentralicen futuros financieros.
Ahí es donde entra Lagrange. Con tecnología ZK de vanguardia y computación descentralizada, $LA está sentando las bases para la economía del mañana. Mientras la moneda fiduciaria se desmorona, la innovación se multiplica.
El futuro pertenece a los constructores, no a los impresores. Y honestamente, estoy cansado de ver a los últimos destruir lo que los primeros crean.
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En 1975, una barra de oro podía comprar una casa.
Avancemos hasta 2025: una barra de oro todavía compra una casa.
¿Ha apreciado realmente el oro? No. El dólar ha colapsado.
1975: $160/oz → 2025: $3,319/oz.
Eso no es creación de riqueza, eso es destrucción de moneda.
He estado observando esta tragedia desarrollarse durante décadas. Las imprentas nunca se detienen, sin embargo, nos dicen que la inflación es "transitoria". ¡Qué chiste! Cada vez que miro mis tenencias de oro, me recuerda cómo nuestro sistema financiero está amañado en contra de la gente promedio.
Mira, no pasé años acumulando metales preciosos para hacerme rico—lo hice para evitar volverme pobre. Mientras todos los demás perseguían ganancias en papel, yo estaba protegiendo mi poder adquisitivo.
¿La lección? El verdadero valor no proviene de aferrarse a activos que se inflan con un sistema roto; proviene de construir proyectos que escalen, aseguren y descentralicen futuros financieros.
Ahí es donde entra Lagrange. Con tecnología ZK de vanguardia y computación descentralizada, $LA está sentando las bases para la economía del mañana. Mientras la moneda fiduciaria se desmorona, la innovación se multiplica.
El futuro pertenece a los constructores, no a los impresores. Y honestamente, estoy cansado de ver a los últimos destruir lo que los primeros crean.
#Lagrange $LA