Las actas de la reunión de septiembre de la Reserva Federal (FED) recientemente publicadas mantienen un tono coherente con la declaración posterior a la reunión, revelando las consideraciones clave de la actual política monetaria.
Los datos económicos muestran que el crecimiento está desacelerándose moderadamente y el mercado laboral también presenta signos de leve debilidad. Aunque la tasa de desempleo se mantiene en niveles bajos, ha aumentado ligeramente. Al mismo tiempo, el nivel de inflación sigue siendo superior al objetivo establecido por el banco central y ha experimentado un ligero repunte recientemente.
En este complejo escenario, el enfoque de la política de La Reserva Federal (FED) se centra en buscar un equilibrio entre el empleo y la inflación. La mayoría de los miembros consideran que la tasa de interés actual está cerca de un nivel neutral, y futuros ajustes de política dependerán más de los cambios en los datos económicos.
Las actas de la reunión muestran que la posibilidad de reducir las tasas de interés 1-2 veces más este año se ha convertido en un consenso entre los miembros. El momento y la magnitud de la reducción de tasas dependerán de si la inflación subyacente puede seguir disminuyendo y de la evolución del mercado laboral.
Sin embargo, los miembros del comité tienen diferencias sobre los factores estructurales de la inflación. Algunos miembros creen que factores a corto plazo, como los aranceles, han impulsado la inflación, mientras que otros temen que, incluso eliminando estas perturbaciones temporales, la inflación siga estando alta. Todos coinciden en que si la inflación subyacente puede acercarse al objetivo del 2% es clave.
Es importante señalar que la revisión de los datos de empleo de marzo ha reforzado la necesidad de una política monetaria más flexible. Esta corrección muestra que el mercado laboral, que anteriormente se consideraba sólido, podría haber sido sobreestimado.
Las actuales medidas de reducción de tasas pueden considerarse como un aflojamiento defensivo, cuyo objetivo es liberar espacio político por adelantado para evitar ajustes más grandes que podrían surgir en el futuro. El mercado ha respondido con calma y lo ha interpretado como una señal positiva.
En general, La Reserva Federal (FED) parece haber entrado en una fase de flexibilización defensiva, respondiendo con cautela al equilibrio entre el crecimiento económico lento y la presión inflacionaria. Esta actitud prudente refleja la profunda percepción y la consideración a largo plazo de los tomadores de decisiones sobre la situación económica actual.
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LuckyBearDrawer
· hace5h
Espero que el próximo año podamos continuar con la gran inflación.
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blocksnark
· hace11h
La reducción de tasas de interés tendrá que esperar hasta el año del mono y el mes del caballo.
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TokenomicsPolice
· hace11h
¿El mercado ha comenzado a jugar sucio de nuevo?
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NFTRegretDiary
· hace11h
Estoy cansado de jugar, estos jargones me hacen sentir confundido.
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PhantomMiner
· hace11h
¡No digas nada! Solo déjalo estar~
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memecoin_therapy
· hace11h
Si bajan o no las tasas de interés, hay que ver si la inflación ha caído o no...
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MerkleMaid
· hace11h
Y otra vez hablando sin parar, la inflación no baja.
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MEVvictim
· hace11h
Otra acta de reunión pretenciosa, mejor sería bajar las tasas de interés directamente.
Las actas de la reunión de septiembre de la Reserva Federal (FED) recientemente publicadas mantienen un tono coherente con la declaración posterior a la reunión, revelando las consideraciones clave de la actual política monetaria.
Los datos económicos muestran que el crecimiento está desacelerándose moderadamente y el mercado laboral también presenta signos de leve debilidad. Aunque la tasa de desempleo se mantiene en niveles bajos, ha aumentado ligeramente. Al mismo tiempo, el nivel de inflación sigue siendo superior al objetivo establecido por el banco central y ha experimentado un ligero repunte recientemente.
En este complejo escenario, el enfoque de la política de La Reserva Federal (FED) se centra en buscar un equilibrio entre el empleo y la inflación. La mayoría de los miembros consideran que la tasa de interés actual está cerca de un nivel neutral, y futuros ajustes de política dependerán más de los cambios en los datos económicos.
Las actas de la reunión muestran que la posibilidad de reducir las tasas de interés 1-2 veces más este año se ha convertido en un consenso entre los miembros. El momento y la magnitud de la reducción de tasas dependerán de si la inflación subyacente puede seguir disminuyendo y de la evolución del mercado laboral.
Sin embargo, los miembros del comité tienen diferencias sobre los factores estructurales de la inflación. Algunos miembros creen que factores a corto plazo, como los aranceles, han impulsado la inflación, mientras que otros temen que, incluso eliminando estas perturbaciones temporales, la inflación siga estando alta. Todos coinciden en que si la inflación subyacente puede acercarse al objetivo del 2% es clave.
Es importante señalar que la revisión de los datos de empleo de marzo ha reforzado la necesidad de una política monetaria más flexible. Esta corrección muestra que el mercado laboral, que anteriormente se consideraba sólido, podría haber sido sobreestimado.
Las actuales medidas de reducción de tasas pueden considerarse como un aflojamiento defensivo, cuyo objetivo es liberar espacio político por adelantado para evitar ajustes más grandes que podrían surgir en el futuro. El mercado ha respondido con calma y lo ha interpretado como una señal positiva.
En general, La Reserva Federal (FED) parece haber entrado en una fase de flexibilización defensiva, respondiendo con cautela al equilibrio entre el crecimiento económico lento y la presión inflacionaria. Esta actitud prudente refleja la profunda percepción y la consideración a largo plazo de los tomadores de decisiones sobre la situación económica actual.