Trump se está impacientando de nuevo. Se dice que está listo para reemplazar a Bessent en el Tesoro si el tipo no puede presionar a la Fed hacia recortes de tasas más rápidos. Movimiento clásico de Trump: presionar públicamente a su propio nombrado mientras el banco central se demora en aliviar. Los mercados están observando esto de cerca. Tasas más bajas normalmente significan más liquidez en busca de rendimiento, y todos sabemos hacia dónde fluye parte de eso. La Fed está siendo cautelosa, pero la presión política está aumentando. Bessent está atrapado entre la independencia institucional y las demandas presidenciales. No es la primera vez, ni será la última. Pero la trayectoria de las tasas importa más que el drama.