La última declaración de Trump refuerza sus principales logros políticos. Según el expresidente, dos factores impulsan el resurgimiento económico de Estados Unidos: la victoria electoral del 5 de noviembre y la estrategia arancelaria de su administración.

La afirmación vincula el impulso político con la ejecución de la política comercial. El 5 de noviembre marcó un punto de inflexión que reforzó su mandato político. Mientras tanto, los aranceles—durante mucho tiempo polémicos entre los economistas—se presentan como herramientas que reconstruyeron la industria manufacturera nacional y permitieron negociar mejores condiciones comerciales.

¿Lo interesante? Esta perspectiva llega mientras los mercados asimilan las continuas tensiones comerciales y su efecto dominó en las expectativas de inflación. Para los traders de criptomonedas que observan tendencias macroeconómicas, las políticas arancelarias históricamente se correlacionan con fluctuaciones en la fortaleza del USD y cambios en el sentimiento de aversión al riesgo. Creas o no en la narrativa, este tipo de discurso político mueve los mercados—especialmente cuando insinúa futuras posturas comerciales que podrían remodelar los flujos de capital a través de las fronteras.