Mi experiencia operando altcoins en Gate me dio una valiosa lección. Una vez, me basé en datos on-chain para posicionarme en un nuevo proyecto; tras la compra, el precio permaneció lateral cerca de un mes y la comunidad fue perdiendo actividad. Contuve las ganas de cambiar de proyecto y esperé pacientemente avances en el ecosistema. Cuando se anunció la primera colaboración del proyecto, el precio subió un 30% de golpe y me sentí eufórico. Según mi plan, debía tomar beneficios parciales, pero la avaricia me hizo pensar: “veamos si sube una vela más”. Finalmente, la noticia positiva se asimiló rápido y el precio retrocedió. Apliqué la disciplina al instante, vendí todo por encima del precio de compra y aseguré beneficios.
Esto me enseñó que, en el mundo cripto, resistir el FOMO (miedo a quedarse fuera) y la avaricia es más difícil—y más importante—que el propio análisis. En movimientos vertiginosos, la disciplina es el único escudo.
Ver originales
Esta página puede contener contenido de terceros, que se proporciona únicamente con fines informativos (sin garantías ni declaraciones) y no debe considerarse como un respaldo por parte de Gate a las opiniones expresadas ni como asesoramiento financiero o profesional. Consulte el Descargo de responsabilidad para obtener más detalles.
#Gate广场新手村第十期
Mi experiencia operando altcoins en Gate me dio una valiosa lección. Una vez, me basé en datos on-chain para posicionarme en un nuevo proyecto; tras la compra, el precio permaneció lateral cerca de un mes y la comunidad fue perdiendo actividad. Contuve las ganas de cambiar de proyecto y esperé pacientemente avances en el ecosistema. Cuando se anunció la primera colaboración del proyecto, el precio subió un 30% de golpe y me sentí eufórico. Según mi plan, debía tomar beneficios parciales, pero la avaricia me hizo pensar: “veamos si sube una vela más”. Finalmente, la noticia positiva se asimiló rápido y el precio retrocedió. Apliqué la disciplina al instante, vendí todo por encima del precio de compra y aseguré beneficios.
Esto me enseñó que, en el mundo cripto, resistir el FOMO (miedo a quedarse fuera) y la avaricia es más difícil—y más importante—que el propio análisis. En movimientos vertiginosos, la disciplina es el único escudo.