Hace dos meses tenía 1000 U en la cuenta sin mover, ahora el saldo muestra 15000 U. Esto no es cuestión de suerte, sino el resultado de llevar al extremo un método aparentemente simple.

La clave son tres palabras: construir por etapas. Mucha gente pierde por entrar con todo de golpe; yo hago lo contrario.

Primero, al abrir posición, solo utilizo el 20% del capital para probar. Si acierto con la dirección, sigo; si me equivoco, me retiro a tiempo y la pequeña pérdida no duele. En esta fase no busco grandes ganancias, sino confirmar la fiabilidad de la tendencia con un coste bajo.

¿La tendencia se confirma? Entonces utilizo un 30% adicional como posición flotante para seguir. Ojo, no entro de golpe, sino que espero los retrocesos para añadir. Cuando sube una ronda, aseguro parte de los beneficios, sin apegarme demasiado.

El verdadero peso está al final: el 50% restante del capital. Pero tengo una regla inquebrantable: solo uso este dinero después de haber realizado dos tomas de beneficios consecutivas. Una vez alcanzo el objetivo de ganancias, liquido todo inmediatamente y me retiro, sin quedarme enganchado.

Este método me obliga a operar como máximo dos veces al día; si la dirección no es la correcta, simplemente espero. Un amigo perdió antes 110.000 €, pero siguiendo este ritmo durante 45 días, ya ha recuperado 76.000 € y sigue avanzando.

En resumen, el mercado no carece de oportunidades, lo que falta es la paciencia para sobrevivir. Si tienes criptos y no sabes qué hacer, o estás atrapado sin salida, prueba este “método simple”: lento, pero seguro.