Después de que se resolviera el caso de las Opciones de TSL, la fortuna de Elon Musk superó la barrera de los 700 mil millones de dólares. Los medios de comunicación han cubierto extensamente la competencia por el título de "el hombre más rico del mundo" — pero hay un punto interesante que merece ser reflexionado: este loco de la tecnología siempre dice que el dinero no es un problema.

En su opinión, la riqueza digital es solo un subproducto. Lo que realmente lo impulsa son esas cosas más grandiosas: resolver problemas prácticos para el futuro. Ya sea impulsando la revolución de los vehículos eléctricos, explorando el espacio o participando en otras fronteras tecnológicas, el dinero en sí nunca ha sido el objetivo. Esta mentalidad es bastante escasa en el ecosistema empresarial actual.