
Los Automated Market Makers (AMMs) constituyen una innovación disruptiva en el trading descentralizado de criptomonedas. Utilizan smart contracts para facilitar intercambios de tokens y de valor, prescindiendo de los libros de órdenes tradicionales. Este mecanismo se ha consolidado como pieza fundamental del ecosistema de finanzas descentralizadas (DeFi), ofreciendo mayor accesibilidad, menores costes y una eficiencia superior frente a las plataformas convencionales de criptoactivos. Comprender la tecnología AMMs en cripto es imprescindible para quienes desean participar en el trading descentralizado actual.
El market making es una estrategia básica de trading en los mercados financieros tradicionales, donde empresas o agentes especializados actúan como intermediarios y facilitan la compra y venta de activos. Los market makers mantienen la liquidez del mercado proporcionando de forma continua precios de compra y venta según el tamaño del mercado del activo subyacente. Estos participantes obtienen beneficios del diferencial entre el precio de compra y el de venta (spread), además de ingresos por comisiones de provisión de liquidez y ejecución de operaciones. Por ejemplo, un market maker tradicional puede fijar un precio de compra de 100 $ y uno de venta de 101 $ para una acción, obteniendo un spread de 1 $ en cada transacción y asegurando que el activo permanezca líquido y negociable.
Un Automated Market Maker (AMM) es una versión avanzada del market making tradicional que opera mediante smart contracts autoejecutables en redes blockchain. A diferencia de los market makers convencionales, los protocolos AMMs en cripto eliminan intermediarios ejecutando automáticamente órdenes de compra y venta según algoritmos predefinidos. Estos protocolos predominan en plataformas de trading descentralizadas y aplicaciones descentralizadas peer-to-peer (P2P) (DApps), permitiendo que cualquier usuario acceda al trading de criptomonedas sin control centralizado.
Los AMMs funcionan mediante liquidity pools (fondos comunitarios) que albergan pares de trading y suministran liquidez para ambos lados del mercado. Uniswap y PancakeSwap son ejemplos destacados. En lugar de libros de órdenes para la formación de precios, los AMMs en cripto emplean algoritmos matemáticos, siendo la fórmula más común x * y = k, donde x e y son las cantidades de dos activos, y k es la liquidez total constante del pool.
Los AMMs en cripto presentan una funcionalidad similar a los libros de órdenes de exchanges centralizados, pero operan con una lógica fundamentalmente distinta. Permiten negociar pares de activos, como ETH/USDC, sin la necesidad de una contraparte directa. Cuando el usuario inicia una operación, sus fondos van al pool de liquidez correspondiente y el algoritmo calcula el precio del activo según la cantidad de tokens en ese pool.
El algoritmo ajusta automáticamente la proporción de criptoactivos en el pool dependiendo del tamaño de la operación, garantizando liquidez suficiente y manteniendo el valor igualado entre los activos. Por ejemplo, si se realiza una compra significativa de ETH en un pool ETH/DAI, el algoritmo incrementa el precio de ETH y reduce el de DAI de forma proporcional para mantener el equilibrio. Los AMMs aplican una comisión por cada operación, que se distribuye entre los proveedores de liquidez del pool, generando un incentivo para que aporten liquidez.
Un liquidity pool es un instrumento financiero basado en smart contracts que concentra fondos de criptomonedas para facilitar operaciones de trading. Permite a los traders depositar activos digitales en smart contracts, que se utilizan para ejecutar órdenes y repartir comisiones de trading. A diferencia de las plataformas centralizadas que requieren emparejar compradores y vendedores, los liquidity pools permiten a los compradores ejecutar órdenes a precios fijados utilizando reservas prefinanciadas.
Los proveedores de liquidez aportan valores equivalentes de ambos activos en cada par de trading (proporción 50:50). Por ejemplo, para participar en un liquidity pool ETH/DAI, el inversor debe depositar valores equivalentes de ETH y DAI. Este sistema ha convertido a los liquidity pools en elementos clave para los protocolos DeFi, resolviendo problemas de slippage y estabilizando los precios de los activos en función del tamaño del mercado, lo que minimiza la volatilidad en periodos de alta actividad.
El mecanismo de provisión de liquidez en los AMMs en cripto se basa en dos principios esenciales. Primero, los liquidity takers pagan comisiones a los proveedores de liquidez al retirar activos del pool. Segundo, al retirar liquidez, la bonding curve transfiere automáticamente las comisiones acumuladas de los takers a los proveedores. Esto genera un modelo económico sostenible, incentivando a los proveedores de liquidez a mantener la profundidad y estabilidad del pool.
Los smart contracts son el núcleo de la operativa de los AMMs en cripto, ejecutando de forma instantánea órdenes de compra y venta en los pools de liquidez sin intervención humana. Estos contratos autoejecutables funcionan bajo condiciones predefinidas y son inalterables durante la ejecución, lo que garantiza transacciones transparentes y confiables. La automatización e inmutabilidad de los smart contracts eliminan el riesgo de contraparte y reducen el riesgo de fraude o manipulación.
Los protocolos AMM emplean tres mecanismos principales para el descubrimiento de precios y la valoración precisa de los activos. El primero opera sin información previa, determinando precios únicamente mediante transacciones locales, como el Constant Product Market Maker (CPMM) de Uniswap V2 y Balancer. El segundo asume que el precio es uno, usado sobre todo por AMMs de stablecoins como Curve V1. El tercero utiliza feeds de precios externos mediante oráculos, presentes en distintos protocolos. Cada método aporta ventajas según el tipo de activo y el caso de uso.
Para minimizar el slippage entre liquidity pools, las plataformas AMMs en cripto emplean algoritmos avanzados de precios, siendo x * y = k la fórmula más empleada. En ella, x es la cantidad de un activo, y la cantidad del segundo activo, y k la liquidez total constante. Aunque esta fórmula es estándar, protocolos como Curve y Balancer aplican variantes más complejas adaptadas a sus necesidades.
El algoritmo mantiene constante la liquidez total ajustando proporcionalmente los valores de cada activo. Por ejemplo, si un usuario compra ETH en un pool ETH/DOT, la cantidad de ETH disminuye y la de DOT aumenta para conservar el equilibrio. Este sistema evita movimientos drásticos de precios y reduce el slippage, asegurando condiciones estables de negociación incluso en operaciones de alto volumen.
El ecosistema blockchain ha visto surgir numerosos protocolos AMM, cada uno con características propias. Entre los principales AMMs basados en Ethereum destacan Uniswap, SushiSwap, Curve y Balancer, mientras que Bancor y otras plataformas aportan innovaciones relevantes al sector. Estos AMMs en cripto han gestionado miles de millones de dólares en volumen de trading, demostrando la viabilidad y escalabilidad del market making automatizado.
Los AMMs en cripto presentan rasgos que los distinguen de las plataformas centralizadas. Su enfoque descentralizado asegura acceso sin permisos, permitiendo a cualquier usuario operar directamente con smart contracts y liquidity pools, sin intermediarios. El uso intensivo de smart contracts posibilita la ejecución automática de operaciones bajo condiciones preestablecidas, mediante lógica "si-entonces" y mínima interferencia externa.
Los AMMs operan en un modelo no custodial donde los usuarios conservan el control total de sus fondos mediante wallets de criptomonedas; las plataformas solo procesan las transacciones, sin almacenar activos. Este diseño mejora la seguridad gracias a la distribución de nodos blockchain, dificultando los ciberataques frente a plataformas centralizadas. Además, algoritmos de precios rígidos impiden la manipulación, asegurando ratios equilibrados y valoraciones justas en los liquidity pools.
Los AMMs en cripto ofrecen múltiples ventajas que han impulsado su adopción en DeFi. Cualquier usuario puede proveer liquidez y obtener ingresos pasivos, y el trading automatizado reduce la necesidad de seguimiento activo del mercado. La eliminación de intermediarios y una seguridad superior respecto a plataformas centralizadas refuerzan su atractivo. Además, los precios algorítmicos reducen de forma significativa el riesgo de manipulación.
No obstante, los AMMs presentan desafíos. Su uso mayoritario dentro de DeFi limita la adopción masiva, y la complejidad técnica puede resultar difícil para quienes se inician en criptomonedas. Las comisiones dinámicas, vinculadas a la congestión de la red, pueden provocar costes de transacción imprevisibles, especialmente en periodos de alta actividad en la blockchain.
Los AMMs en cripto y los modelos de libro de órdenes son enfoques radicalmente distintos para facilitar operaciones. Los libros de órdenes implican gestión intermediada y emparejamiento de órdenes, mientras que los AMMs permiten el trading mediante liquidity pools algorítmicos, sin necesidad de contrapartes. Una diferencia clave está en la estructura de incentivos: los AMMs recompensan a los proveedores de liquidez con parte de las comisiones de las transacciones, creando un modelo económico participativo, mientras que las plataformas centralizadas con libros de órdenes suelen retener todas las comisiones para sus operaciones.
Los AMMs en cripto son ya esenciales para el ecosistema DeFi, transformando la forma en que los traders de criptomonedas acceden a liquidez y generan ingresos pasivos. Al asegurar precios estables mediante algoritmos y permitir la autocustodia con bajas barreras de entrada, los AMMs han creado un entorno financiero más inclusivo y equitativo. Esta democratización del market making ha convertido el trading de criptomonedas en un mercado abierto donde cualquiera puede ser trader y proveedor de liquidez.
Los Automated Market Makers marcan un antes y un después en el trading de criptomonedas, integrando tecnología de smart contracts con incentivos económicos innovadores para crear mercados financieros eficientes, accesibles y descentralizados. Gracias a los liquidity pools, algoritmos de precios y acceso sin permisos, los AMMs en cripto han superado muchas de las limitaciones de las plataformas centralizadas, otorgando a los usuarios mayor control sobre sus activos. Aunque presentan ciertas complejidades y limitaciones, los AMMs son fundamentales para el desarrollo de DeFi, aportando soluciones sostenibles para la provisión de liquidez y el descubrimiento de precios. Conforme evolucione la tecnología blockchain, los AMMs en cripto jugarán un papel cada vez más relevante en el futuro de las finanzas descentralizadas, suministrando la infraestructura para un sistema financiero más abierto, transparente e inclusivo.
Los AMMs son protocolos de exchanges descentralizados que permiten operar criptomonedas mediante liquidity pools. Fijan precios según la proporción de activos en el pool, eliminando los libros de órdenes tradicionales.
Uniswap es considerado el mejor AMM en cripto, liderando tanto en capitalización de mercado como en volumen de operaciones. Es uno de los exchanges descentralizados más relevantes del sector DeFi.
Los AMMs son generalmente seguros gracias a los smart contracts, aunque las vulnerabilidades en el código pueden suponer riesgos. La seguridad depende de la reputación de la plataforma y de la calidad técnica de sus contratos.
Los proveedores de liquidez (LPs) aportan tokens a los pools de AMMs. Obtienen comisiones por las operaciones y pueden retirar sus fondos en cualquier momento. Los LPs son fundamentales para mantener el volumen de trading y la estabilidad de precios en los AMMs.











