La policía española arrestó a Álvaro Romillo Castillo, conocido como "Cryptospain", por liderar una $300M esquema piramidal que engañó a 3,000 inversores.
El Madeira Invest Club de Castillo se hacía pasar por un fondo exclusivo en criptomonedas y activos de lujo, pero canalizaba el dinero a través de cuentas offshore y empresas pantalla.